QUÉ FIESTA

A pesar de ser de todos sus herederos, Dalma y Gianinna ocupan el palco de Boca

Las hijas del astro argentino se mostraron con Daniel Osvaldo ocupando el lugar que heredaron.
jueves, 21 de octubre de 2021 · 11:03

El palco en el que Diego Armando Maradona tantas veces grito goles y se emocionó hasta las lágrimas fue, para él, su segunda casa. Ahora, a pesar de que es para todos los herederos, son Dalma y Gianinna Maradona quienes lo ocupan.

Dalma y Gianinna regresaron a la Bombonera junto a Daniel Osvaldo, el exdelantero xeneinze, quien acompañó a su nueva familia al encuentro de Boca Juniors contra Godoy Cruz, y observaron el partido nada menos que desde el palco de ¡Diego Armando Maradona!

Foto en el palco. 

Junto a las Maradona y Dani Stone, quien vistió la camiseta Azul y Oro entre 2015 y 2016, estaba Benjamín Agüero, hijo de Gianinna y Sergio el “Kun” Agüero.

Dani Stone es un cantante que, actualmente, tiene una banda llamada “Barrio Viejo” y tuvo dos pasos por Boca Juniors, el club de los amores de su ahora suegro, Diego Maradona. 

A la familia se la pudo ver muy feliz desde el palco heredado. Daniel Osvaldo, quien brilló en Europa, se retiró en julio de 2020, en plena pandemia, luego de haber jugado apenas dos partidos en Banfield en la temporada 2019/2020 para dedicarse de lleno a su otra pasión, la música.

Al hablar sobre el deceso de Diego Maradona, el exfutbolista contó: “Esperaba que fuera mentira. Lo voy a amar toda la vida.  Quince días después me cayó la ficha. Me encerré en el baño de mi casa con las camisetas que tenía y me puse a escuchar todas las canciones de Maradona habidas y por haber. Le hice un tango”, aseveró.

Daniel y Gianinna. 

Lo curioso de las vueltas que da la vida es que, meses más tarde de tener esa experiencia casi mística con el fallecimiento de Diego, se puso de novio con su hija.

El palco de Maradona recobró mucho valor significativo tras el fallecimiento del astro del fútbol, cuando todos los estadios del país, y algunos del mundo, se encendieron a la vez. El homenaje eterno al mejor de todos los tiempos iluminó el cielo esa noche, pero en la Bombonera fue distinto, ya que todas las luces se apagaron, menos las del palco que ocupan hoy las herederas de Maradona.