Orzuelos: 5 consejos para poder curarlos de manera segura

A pesar de que se habla muy poco de ellos, los orzuelos son una problemática que muchos sufren y que pocos saben tratar adecuadamente. Si bien muchas personas los padecen, no está muy clara la manera en la que pueden o deben ser tratados. Al estar hablando de una zona tan delicada como el ojo, será crucial que el cuidado correspondiente sea el óptimo. 

Existen varias formas para palear las consecuencias de los orzuelos, algunas más caseras que otras. A pesar de que muchas han surtido efecto, debemos decir que no funcionan de igual manera en todos los casos y por eso insistimos que, ante una situación como esta, consultes primero con un profesional médico para saber cómo tratar cada caso. 

Pero primero que nada, ¿ qué es un orzuelo? ¿ Sabés como se forman y por qué?. A continuación, te contamos de qué se trata esta reacción. 

¿Qué es un orzuelo?

Un orzuelo, también conocido médicamente como absceso, es una pequeña inflamación similar a un grano, que suele crecer en el borde exterior de los párpados. Éstos aparecen generalmente ante la acumulación de suciedad o piel muerta en esa zona, obstruyendo glándulas y poros de la piel del ojo. 

Una vez que esas glándula se bloquean, se generan bacterias que se reproducen con rapidez provocando la inflamación de la zona y la aparición del orzuelo. Estas protuberancias generan dolor e hinchazón en el ojo, además de picazón y cambio de color en la zona. 

¿Cuál es la mejor forma de curar un orzuelo?

Como aclaramos anteriormente, consultar primero con un profesional será lo adecuado para poder determinar de qué manera debe tratarse cada caso. Sin embargo, existen algunas maneras caseras de cuidar o de ayudar a la curación del orzuelo. Entre algunas de ellas, podemos encontrar:

Paños de agua tibia

El calor es la mejor manera de curar un orzuelo ya que la temperatura ayuda a que sus líquidos puedan drenar de forma natural e indolora. Lo mejor será hacerlo con un papel o paño humectado con agua tibia; será importante que no se encuentre "mojado" sino húmedo, por lo que se recomienda escurrir el paño utilizado. 

Este método se puede realizar cuatro veces por día, procurando mantener el paño durante 5 o 10 minutos dependiendo de cada caso.

Masaje en la zona 

Al igual que en el caso anterior, esta forma será mejor realizarla con un paño para no involucrar a las bacterias de nuestras manos. Con un pequeño paño, podrás masajear la zona para ayudar al orzuelo a drenar el área, aunque se recomienda no hacerlo en caso de sentir algún tipo de dolor.   

Limpieza de la zona 

Este método también funcionará utilizando solución salina, pero también puede hacerse con jabón neutro o 'shampoo' para bebés que no provoca ardor en los ojos. Con un algodón, paño o con las manos bien higienizadas, lavar la zona todos los días con cuidado hasta que el orzuelo desaparezca. Esto también servirá para que no vuelvan a aparecer. 

Adiós al uso de maquillaje 

Para evitar una irritación más imponente, limitar al máximo el uso del maquillaje y también de los lentes de contacto. A su vez, se recomienda no hacerlo para no trasladar ninguna bacteria a tus herramientas de maquillaje y así no reincidir con el orzuelo. En cuanto a los lentes de contacto, se recomienda utilizar anteojos hasta que el orzuelo haya desaparecido totalmente. 

Usar bolsas de té 

En caso de desistir del uso de un paño, podrás usar una bolsa de té caliente, recomendablemente de té negro. Esta variedad ayuda muchísimo a aflojar con la hinchazón, además de poseer propiedades curativas que combaten distintas bacterias. La idea sería hervir agua, depositar la bolsa de té y dejarla aproximadamente durante un minuto. 

Una vez hecho lo mencionado, esperar a que la bolsa se enfríe y ubicar en la zona del orzuelo durante 5 o 10 minutos. También será importante procurar no usar la misma bolsa en los dos ojos para no transferir ningún tipo de bacteria. Si bien los orzuelos no son contagiosos, necesitan que le prestemos atención a las medidas de desinfección e higiene..