MASCOTAS

Mascotas: cómo evitar que los perros ladren todo el tiempo

Qué hacer si no puedes identificar el objetivo de sus ladridos.
domingo, 8 de agosto de 2021 · 10:00

Los perros tienen un instinto protector por naturaleza y por ese motivo suelen marcar territorio. A veces ese sentido de protección puede manifestarse con sus humanos o consigo mismo. Una de las expresiones que utilizan los perros cuando algo no les gusta es el ladrido.

Los ladridos de los perros pueden decir muchas cosas, aunque a veces no sepamos interpretarlos. Suele pasar que los perros ladren mucho y no sepamos el porqué y lo importante en este caso es identificar el objetivo. Como todo es práctica, si tu perro ladra mucho y no sabés qué hacer aquí te dejamos unos consejos útiles. 

El doctor veterinario Juan Enrique Romero presentó una guía para Infobae en la que detalla el procedimiento a seguir para que tu amigo no ladre por demás. 

Saber decir "NO"

Primero hay que hacerles saber que no está bien que se hagan escuchar por cualquier cosa. Decirles firmemente "No" cada vez que lo hacen sin motivo aparente es una buena opción. La clave está en verbalizarlo una única vez, ya que si continuamos diciéndolo a medida que continúan los ladridos, podrán interpretar que los estamos alentando. 

Cuando se quedan mucho tiempo solos

Es difícil educar a un perro que está todo el día sin sus humanos, ya sea porque las personas están fuera de casa trabajando o realizando cualquier otro tipo de actividades. Así, el doctor Romero recomienda utilizar la radio para crear una sensación de presencia. Según indica, al dejar el volumen bien elevado, bloqueamos los ruidos externos y nuestra mascota no tendrá a quién ladrarle

Extraño amigable

Si identificamos que nuestro animalito ladra cuando se encuentra con una persona en particular que no pertenece al núcleo familiar, hay una buena solución. Por más que sea alguien extraño, lo cierto es que los perros no pueden resistirse a la comida. Así que, utilizando esa condición a nuestro favor, podemos hacer que la persona cada vez que venga a nuestra casa traiga consigo una golosina, un "premio" para ganarse la confianza. De esta forma, evitaremos que le siga ladrando. Siempre la visita debe darle el "premio" ya dentro de la casa y en presencia de los dueños, ya que de otra manera el perro puede acostumbrarse a que cualquier extraño le ofrezca comida, siendo contraproducente para la seguridad de la casa y la del propio animal.

Invisibilizar el objetivo 

Al tapar la vista hacia el exterior de la casa, evitamos que el ladrido se prolongue. Puede suceder que los perros escuchen eso que no les gusta antes de verlo y si bloqueamos la visión hacia afuera, al no poder visualizarlo se cansarán y dejarán de ladrar