CARLITOS MENEM

Carlitos Menem: Antonella no puede soltar el recuerdo de su padre

La nieta del expresidente y de Zulema Yoma lo llama su ángel guardián
viernes, 3 de junio de 2022 · 16:48

Carlitos Menem  era piloto de automovilismo. Tenía 26 años cuando falleció a raíz de un accidente de helicóptero, que se convirtió en un hecho que conmocionó al país, y que involucrara directamente a su padre, el entonces presidente Carlos Saúl Menem. 

La vida de Carlitos Menem se truncó el 15 de marzo de 1995. Aunque la causa fue archivada por la justicia, su madre, Zulema Yoma, asegura que su hijo fue ultimado como represalia a las actividades que realizaba su papá. En el camino hubo demasiadas  acusaciones cruzadas y todo tipo de entredichos. 


Sin embargo, también estaba una pequeña a la que muchos negaron que fuera hija del corredor, fruto de su relación con Amalia Pinetta. Durante años luchó por el reconocimiento de su verdadera identidad, hasta que en 2004 la justicia sentenció que su verdadero nombre es Antonella Carla Menem Pineda.

Ella tenía 7 años cuando Carlitos perdió la vida. A pesar de todo lo que debió soportar y de tantos años de lucha, la familia Menem nunca la aceptó como una de ellos. Siempre fue dejada de lado, alejada y hasta rechazada.


"Una se acostumbra con el paso de los años, pero me costó un montón y mucho no ayudó el tema del apellido. La pasé bastante mal en el colegio", contó en una entrevista que le hicieron en febrero pasado, en “A la Tarde”. 

En esa ocasión contó que tuvo “traumas psicológicos y empecé a pensar que era la culpable por todo ese rechazo, cuando claramente no lo era". Con respecto a su abuela, dijo que "sólo la vi cuando tuve que hacer el ADN. Ella y Zulemita nunca quisieron que me hiciera ese test".


Pese a las humillaciones sufridas, Antonella continúa bregando por lo que considera legítimo: ser la hija de Carlitos. Hace algunas horas subió a sus redes sociales un emotivo video sobre su progenitor. “Mi ángel de la guarda. Te amo”, dice.

Carlitos falleció hace más de 27 años. Pese al tiempo transcurrido, su recuerdo permanece inalterable en aquellos que lo amaron, sobre todo en su hija, quien no puede dejar de evocarlo.