Julieta Prandi: "Con mis hijos, hui de una muy mala película de terror"

Julieta Prandi se cansó de lucha contra molinos de viento. La justicia volvió a darle la espalda y no quiere escudarse nuevamente en el silencio. Seguramente, aprendió que hablar sana, más que cualquier otra cosa. Ya no espera más, es momento de prioriozarse.

En un hilo de Twitter, Julieta Prandi contó retazos de su vida desde el momento en que decidió abandonar su casa, el 14 de febrero de 2019. Desde ese momento, comenzó un largo recorrido por los estrados judiciales, que la llevaron a descreer de la voluntad de los jueces.

La conductora de "Es por Ahí", el programa que conduce con Tucu López por América, estuvo casada con Claudio Contardi durante una década, con quien tuvo a sus hijos Mateo y Rocco. La separación de la pareja fue el inicio, o bien el corolario, de las difíciles situaciones que tuvo que atravesar.

"¿Por dónde empezar? Llevo en esta lucha desde el día que decidí irme de mi casa con mis hijos llevándome solo la ropa", contó la modelo. Lo hizo huyendo de situaciones donde se puso en peligro su integridad física y moral. Para ella, fue "una muy mala e inverosímil película de terror".

Fuente:(eltrecetv.com).

A la vez, precisó que “hoy, a más de 3 años de aquel día, sigo sin recibir respuestas de la Justicia", pues "hasta diciembre del 2021 estuve en el Juzgado 3 de San Isidro, bajo la decidia de un juez que ante mis denuncias incansables decidió apartarse". A raíz de ello, la denuncia llegó "al Juzgado 5, con una jueza competente". Sin embargo, se vio sorprendida con otra medida. "Al mes de  encausarse, sin explicación y ‘por arte de magia’ volvieron a sortearme de juzgado".

Se dijo a sí misma, "después no quieren que uno piense mal de la Justicia". Pero, "lo cierto es que donde caí ‘por sorteo’ (el Juzgado 2), pareciera también estar riéndose de mí y de mis hijos”, dijo con enfado contenido.

Con todo ello, la conductora no pudo evitar su contrariedad. “Todos los expedientes que el juzgado original había ignorado o encajonado, y que la jueza del Juzgado 5 luego había empezado a revisar, ahora en el juzgado 2 parecen estar nuevamente durmiendo la siesta". No pudo evitar comentar que dicha causa está "tomándose tiempos tan largos e inexplicables que no hacen otra cosa que volver a generar sospechas".

Como si la catarsis verbal no fuera suficiente, Julieta fue por más, y arremetió nuevamente contra aquellos que no movilizan la causa. "Ni siquiera se dignan a exigir que el ‘padre’ cumpla con la cuota de alimentos", enfatizó. Por último, se preguntó "en qué país vivimos". Ya no se calla más, aunque la justicia le prohibió hablar públicamente sobre su exmarido y el estado de la causa.