Abel Pintos y su hijo: dos gotas de agua

Abel Pintos es increíblemente feliz. Lo repite hasta el cansancio. Asegura que su vida se transformó desde el momento en que se convirtió en papá de Agustín, el 22 de octubre de 2020, encontrando un sentido diferente a todo lo que había hecho hasta entonces.

La semana pasada asustó a todos, pues el pequeño sufrió un accidente doméstico, que derivó en atención hospitalaria, mientras estaban en Resistencia, Chaco. En esa oportunidad, Abel Pintos agradeció "al personal que, con absoluta celeridad y amor, atendieron a Agus y nos contuvieron en la angustia".

Si bien el cantante y su esposa, Mora Calabrese, no solían publicar fotos de su hijo, todo cambió cuando él abrió su cuenta de TikTok y comenzó a subir escenas desconocidas de su vida profesional, pero también de su vida personal.

Allí pudieron verse distintas imágenes de Agustín, donde quedaba más que clara la amorosa relación que los une. Sin embargo, lo que más llamó la atención es el increíble parecido entre padre e hijo. 

Hace un par de horas, el intérprete subió un tierno video mientras jugaba con Agustín. El papá le hacía monerías y el pequeño se reía, sin soltar su chupete. Sin dudas, era un momento donde se evidenciaba el amor infinito que fluye entre ellos y en toda la familia.

Otra vez, las similitudes entre ambos no dejan de asombrar a sus seguidores, sobre todo, porque el retoño tiene casi dos años y sus rasgos y características físicas ponen en evidencia que son dos gotas de agua.

¿Qué problema tiene Abel Pintos?

En su primera infancia, el músico sufrió un grave problema físico. Desde su nacimiento tenía una malformación en uno de sus pies, conocida como "pie equinovaro" o "pie bot".

Era "una cuestión de tendones retorcidos, sujetos o tensos", supo contar en alguna oportunidad. Ante la complejidad, se tuvo que someter a una cirugía desde muy pequeño: "Por lo que tuvieron que operarme casi recién nacido", indicó.