Gabriela Sabatini: regreso con gloria

Gabriela Sabatini no solo es una de las máximas deportistas del país, sino que también es la más importante tenista femenina que diera Argentina. Es una ídola total para todos los que aman este deporte, pero también es una referente indiscutible para las nuevas generaciones. Es una verdadera leyenda, no por nada fue incorporada al Salón de la Fama del Tenis Internacional.

Ganadora de una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de 1988, en Seúl, y del US Open en 1990, entre tantos otros títulos. Se mantuvo en el Top Ten del tenis femenino una década. Con una trayectoria deportiva que comenzó en su infancia, Gaby se retiró a los 26 años, mientras estaba en lo más alto de su carrera.

Y exactamente 26 años después, regresó a una de aquellas canchas internacionales que la aplaudiera de pie, sobre todo porque tenía 15 años cuando se metió entre las grandes del tenis mundial. Ahora jugó de nuevo en Roland Garros, en el "Torneo de Leyendas", y fue ovacionada como el primer día.

La vuelta de Gaby significó un regreso con gloria. Lo hizo acompañada de Gisela Dulko. Aunque no ganó la final, quienes la vieron jugar sintieron que su magia estaba intacta. La más famosa pista de ladrillo francés tuvo la dicha de recibirla una vez más, de ver sus saques, de percibir su garra, de verla jugar como en sus mejores épocas.

“No quiero llorar, pero cada instante fue un pequeño momento de felicidad. Conozco esta cancha, tuve algo de tensión, fue algo especial. Qué puedo decir, gracias por compartir todo esto. Gracias por haber venido”, dijo en inglés mientras recibía una plaqueta por el segundo lugar, plena de emociones.

A la cadena ESPN, la tía de Oriana Sabatini comentó que “fueron increíbles todos estos días. Muchas emociones desde que nos invitaron a jugar, ahí ya aparecieron. Compartir todo con Gise fue muy especial también. Fue muy lindo todo lo que vivimos afuera, se armó un grupo también fuera de la cancha y lo vamos a extrañar mucho”.

En sus redes sociales afirmó que se vivieron "muchas emociones, compartido con leyendas" como Lindsay Davenport, Mary Joe Fernandez y Gisela Dulko". Pero también tuvo especio para agradecer "al embajador argentino en Francia, Leonardo Costantino, por su recibimiento", quien organizó una emotiva velada en la Embajada para agasajar a la tenista.

Con 52 años, Gaby se atrevió a regresar, lo hizo por la puerta de quienes alcanzaron la gloria. Fue todo un éxito, a punto tal que su nombre revolucionó Twitter y estuvo entre los más mencionados, aunque ella lo tomó con mucha humildad, la misma que tuvo siempre.